Buscar...

Amor propio

Feb 2021

Amor propio

Me gusta ponerle onda a la vida. No es una pose ni me creo mejor por eso. Es mi forma de ser. Te doy un ejemplo, si invito amigos a cenar me encanta agasajarlos. Paso días pensando el menú, pongo la mesa con mi mantel favorito, saco esa vajilla tan coqueta que me da pena usar todos los días (además está acumulando telarañas), servilletas de tela, cubiertos de verdad. Unas flores por ahí, unas lucecitas por allá. Obvio: entrada, plato principal y postre. Una trilogía indispensable. El anfitrionismo para mi es muy importante. Es más. Si me pedís que me defina en pocas palabras, te digo Capricornio, divertida y buena anfitriona. Así de serio es el tema para mi.

 Pero me fui por las ramas, estábamos hablando de cómo tirarle unas magias a la rutina. O me hago la canchera y te uso una palabra que me encanta. Flow. Que la cosa fluya. Vivir más livianamente, más sueltos, sin tanto estrés. Y acá voy con mi segundo ejemplo. Odio los días de lluvia (el pelo, la humedad y el frizz… un gran tema para debatir en otro momento). Justamente por este rechazo que siento, durante mucho tiempo negué su existencia. Pero entonces llovía y yo siempre sin los accesorios necesarios. Hasta que me di cuenta de que tenía que hacer algo. El famoso “si no puedes vencer a tu enemigo, únete a él”. Y fui a fondo, como con el anfitrionismo. Me armé de un equipo que consiste en el piloto más cool que encontré en Nueva York, unas botas que no pueden más de lindas y este paraguas divino lleno de corazones Paraguas grande que te digo, si te descuidás, también sirve como sombrilla playera porque es enormeeee. Entonces, cuando el cielo se pone gris y empieza a relampaguear, voy en busca de mi súper kit y espero que se largue… no te digo chocha, pero casi.

 Puede sonar un poco cursi, pero la felicidad es eso, ¿no? Una sumatoria de pequeñas cosas o vivencias que te hacen sentir bien. Y acá voy con mi último ejemplo clave. Se viene el Día de San Valentín. ¿Y sabés qué? Decidí mimarme y autoregalarme esta cartera que me enamoró desde el primer día que la vi Cartera Cartagena… Y que además tiene una estampa que sintetiza hermosamente todo esto de lo que venía hablando: LIVE. LOVE. DREAM. 

 

¡Brindo por cultivar el amor propio!